Muestra seguidamente la relacion entre neurosis asi­ como perversion

Muestra seguidamente la relacion entre neurosis asi­ como perversion

En esos casos el fin sexual normal firme en la union sobre las genitales en el coito queda desviado. Se dan entonces lo que el novio llama “transgresiones anatomicas” donde situa entre otras, el oficio sexual de las mucosas bucales asi­ como labiales como fin sexual ultimo, la sexualidad anal o el fetichismo; asi­ como la “fijacion de las fines sexuales preliminares” donde situa el tocamiento asi­ como contemplacion, y el sadismo-masoquismo.

Este entrenamiento seri­a ampliado y corregido varias veces

Descarta la doctrina imperante del segundo que consideraba las perversiones igual que “degeneraciones nerviosas” asi­ como, siguiendo una directiva totalmente distinta, plantea la hipotesis de que la disposicion a la perversion seri­a la norma primitiva asi­ como general del instinto sexual en la infancia partiendo sobre la cual se desarrollara la conducta sexual normal. Mismamente, lo sexual perverso, Conforme se deduce de el texto, ocurre an estar en el foco de la sexualidad humana. Idea novedosa asi­ como efectivamente escandalosa.

En todos estos apartados referente a las aberraciones sexuales se incorporan importantes notas a pata de pagina en las que Freud total y rectifica algunas ideas conforme va avanzando la desarrollo de su planteamiento.

En el apartado El instinto sexual de las neuroticos sostiene la misma idea que en estudios anteriores Conforme la cual las psiconeurosis, Conforme su vivencia clinica, reposan en fuerzas instintivas sobre caracter sexual, de forma que la vida sexual de dichas individuos se exterioriza monopolio, abundante o parcialmente en las sintomatologia, lo que le lleva a tener en cuenta que las sintomas no son sino la expresion sobre su vida sexual.

El enfermo regresa a sus mas antiguos conflictos tratando de colocar fin NOvias DE ARENA a un tema inconcluso. Anade que los sintomatologia neuroticos nunca se originan a costa del instinto sexual conocido como normal, sino que representan la exteriorizacion de los instintos que se considerarian perversos, o sea, que se germinan a costa de la sexualidad anormal. Es desde aca desde a donde formulara la conocida periodo sobre “la neurosis es el cenizo de la perversion” (Freud b, p.1190). El psiconeurotico alberga en su inconsciente tendencias sexuales semejantes a las que se observan en las desviaciones de la vida sexual normal, solo que permanecen reprimidas.

De Freud, la neurosis resulta una consecuencia sobre conflictos infantiles no resueltos, sobre un crecimiento incompleto

En el ultimo apartado, Indicacion del infantilismo de la sexualidad, frente a la dialogo de si las perversiones dependen de condiciones congenitas o tienen su familia en vivencias casuales, Freud aduce que en las perversiones existe, desde despues, alguna cosa congenito, pero una cosa que es congenito a todo el mundo los varones: una disposicion general a la perversion, que puede acentuarse por influencias externos. Se prostitucion de las raices innatas de el instinto sexual.

Conforme Freud, en cada aberracion sexual lo que se da es una obstruccion de el crecimiento asi­ como un cierto infantilismo. Las diques de repugnancia, verguenza y moral o compasion, poderes limitadores del instinto sexual que se levantan en la infancia, nunca se dan suficientemente.

Se concluye de este preparacion que el instinto sexual normal, esto es, la sexualidad adulta, se originara por la agrupamiento sobre excesivamente diversos impulsos de la vida sexual infantil en una unidad orientada hacia un unico fin.

Observando el predominio de las inclinaciones perversas del psiconeurotico y teniendo en cuenta la detencion de el crecimiento sexual observada en las perversiones; Freud se vuelve hacia el analisis sobre la vida sexual infantil. Si bien, vacilo durante anos primeramente sobre aceptarla absolutamente.

Constituye la pieza central de el comun. El punto de partida de este segundo adiestramiento esta en explicar el rechazo sostenido por parte sobre los adultos a hablar sobre sexualidad pueril, de este modo como la negligencia en las numerosos trabajos en el crecimiento del nino que nunca incorporan ningun capitulo referente al incremento sexual y, En Caso De Que hacen alguna analisis referente a alguna actividad sexual prematura, lo realizan como casos curiosos por su excepcionalidad. Esta omision, Igualmente sobre explicarla por la educacion usual sobre las autores, considera que se tiene que a la represion asi­ como la amnesia consiguiente, grandemente eficaz, que los adultos ejercen sobre las primeros anos de vida sobre la infancia de las que ninguna cosa se retiene en la memoria, menos algunos recuerdos incomprensibles y fraccionados. Ante dicha etapa, Freud se adentrara en un penetrante analisis de las manifestaciones sexuales infantiles.

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